qué alegría, el libro es un joyón, y cuánto me alegro de que me quede tan cerca Cálamo, no me pierdo el sarao ni la firma de Cristina. Enhorabuena por la parte prologal que te corresponde, Fernando. Un abrazo, Patro.
Me sumo a los comentarios anteriores. Los cuentos de Fernández Cubas son muy buenos y merecen éste y cualquier otro galardón. ¡Cuántas veces no habré leído en clase el cuento de Tomás, Olla, Cuchara, Escoba, Estuche, etc." Enhorabuena a Cristina Fernández Cubas y por la patrte que te toca, lo digo por el prólogo, también a ti, Fernando.
Desde el Cálamo 2008 mi número es el siete, mi termómetro marca 37 grados de azul, la otredad me invade, el bicentenario de Poe saluda a Cristina, la tensión entre conciencias se expande, una chica verde me sonrió en el café, visito Estambul, invento mi identidad, los objetos son quienes ahora me observan a mí... Me alegro de este contagio; me he dejado invadir de la breve, pero intensa narrativa de Cristina, celebro que la literatura esté, pues, de enhorabuena. He olido el papel, acariciado las esquinas de "Todos los cuentos" y he mirado los ojos de pozo de la fotografía que Tusquets nos ofrece de la autora: brillo, tensión, técnica, magnífica competencia idiomática, humor... se muestra tan ancho el territorio que las palabras no lo abarcan... El prólogo, como los cuentos, también ya organismo vivo, estará de tiros largos, por la parte que le toca. Felicidades.
6 comentarios:
qué alegría, el libro es un joyón, y cuánto me alegro de que me quede tan cerca Cálamo, no me pierdo el sarao ni la firma de Cristina. Enhorabuena por la parte prologal que te corresponde, Fernando. Un abrazo, Patro.
Un premio que contiene literatura, al fin. Salud.
http://tropicodelamancha.blogspot.com
Bravo. Toda una lección para otros premios. Un abrazo.
Me sumo a los comentarios anteriores. Los cuentos de Fernández Cubas son muy buenos y merecen éste y cualquier otro galardón. ¡Cuántas veces no habré leído en clase el cuento de Tomás, Olla, Cuchara, Escoba, Estuche, etc." Enhorabuena a Cristina Fernández Cubas y por la patrte que te toca, lo digo por el prólogo, también a ti, Fernando.
Desde el Cálamo 2008 mi número es el siete, mi termómetro marca 37 grados de azul, la otredad me invade, el bicentenario de Poe saluda a Cristina, la tensión entre conciencias se expande, una chica verde me sonrió en el café, visito Estambul, invento mi identidad, los objetos son quienes ahora me observan a mí... Me alegro de este contagio; me he dejado invadir de la breve, pero intensa narrativa de Cristina, celebro que la literatura esté, pues, de enhorabuena. He olido el papel, acariciado las esquinas de "Todos los cuentos" y he mirado los ojos de pozo de la fotografía que Tusquets nos ofrece de la autora: brillo, tensión, técnica, magnífica competencia idiomática, humor... se muestra tan ancho el territorio que las palabras no lo abarcan... El prólogo, como los cuentos, también ya organismo vivo, estará de tiros largos, por la parte que le toca. Felicidades.
A pesar de la mínima parte que me toca, gracias por el interés que le prestáis al libro, y por vuestras generosas intervenciones, claro está.
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