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"Giros"
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Anoche discutimos por el mando de la tele. Pero luego, en la cama, nos acariciamos un poco, y susurró mañana eliges tú el programa, amor. Y también: puede que tengas razón y sea buen momento. Me subió el camisón, y por una vez no alargó la mano hasta el primer cajón de la mesilla, sino que entró desnudo y tembloroso, como un adolescente, y siguió invocando con palabras al hijo que no sabíamos imaginar.
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Esta mañana nos levantamos a las siete. Mientras me duchaba, hizo el café. Al salir del baño me extrañó no oírlo silbar. Me acerqué a la cocina a medio vestir, con el pelo mojado. Pero estaba vacía: sólo encontré la jarra de leche dando vueltas en el microondas. Me he quedado un rato mirando la puerta de cristal. Fijamente. Como quien se asoma a su futuro. La leche burbujeó, lamió el borde del recipiente, y se ha desparramado en dibujitos que igual significan algo. Aunque yo, francamente, no entiendo nada.
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"Giros"
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Anoche discutimos por el mando de la tele. Pero luego, en la cama, nos acariciamos un poco, y susurró mañana eliges tú el programa, amor. Y también: puede que tengas razón y sea buen momento. Me subió el camisón, y por una vez no alargó la mano hasta el primer cajón de la mesilla, sino que entró desnudo y tembloroso, como un adolescente, y siguió invocando con palabras al hijo que no sabíamos imaginar.
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Esta mañana nos levantamos a las siete. Mientras me duchaba, hizo el café. Al salir del baño me extrañó no oírlo silbar. Me acerqué a la cocina a medio vestir, con el pelo mojado. Pero estaba vacía: sólo encontré la jarra de leche dando vueltas en el microondas. Me he quedado un rato mirando la puerta de cristal. Fijamente. Como quien se asoma a su futuro. La leche burbujeó, lamió el borde del recipiente, y se ha desparramado en dibujitos que igual significan algo. Aunque yo, francamente, no entiendo nada.
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"Princesa"
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El chico me gustaba. Cerré los ojos, cuando se acercó: pensé que por fin iba a besarme. El dolor me atravesó por sorpresa. Ahora me tiene clavada en un corcho, en su habitación. Y ni siquiera me mira.
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"Princesa"
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El chico me gustaba. Cerré los ojos, cuando se acercó: pensé que por fin iba a besarme. El dolor me atravesó por sorpresa. Ahora me tiene clavada en un corcho, en su habitación. Y ni siquiera me mira.
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* Nuria Mendoza nació en Huelva, en 1968, pero vive en Sevilla, donde lee, escribe, pasea, hace fotos, va al cine y trabaja como pediatra. Estos microrrelatos no sólo son inéditos sino también los primeros que publica. La segunda foto, también obra suya, está hecha en Oporto.
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Magníficos textos. Felicidades.
ResponderEliminarFrancesc Cornadó
Serán los primeros textos que publica Nuria, pero yo creo que acreditan muchas horas de lectura y de poso literario. En “Giros” la primera frase vende muy bien el tono sombrío y tragicómico de la historia. Un principio aparentemente intrascendente, doméstico, como de arrebato conyugal. Que desemboca en un final donde se sugiere un contraste desalentador, cuando la supuesta frialdad del cabello mojado se pone en contacto con el hervor de la leche desparramada. Y que deja el futuro sujeto a una interpretación inútil de leyes incomprensibles.
ResponderEliminarMe gusta especialmente el juego verbal de ese segundo párrafo, que se inicia en tiempo pasado (cerrando una frase tan concreta como para fijar la hora exacta) y acaba en tiempo presente (en una frase abierta y negativa) después de escalonar algún fragmento en pretérito perfecto. No sé si la autora ha pulido expresamente esa sugestiva combinación de verbos o si le ha salido de manera espontánea. Pero presumo que Nuria se toma muy en serio su trabajo. Desde aquí, mi enhorabuena.
Estas piezas cautivan por su aparente sencillez, fragilidad y por lo mucho que esconden detrás. Serán los primeros que publica, pero no los últimos. Felicidades a la autora y gracias Fernando por traerla.
ResponderEliminarAbrazos.
Pues para ser los primeros que publica me han parecido soberbios. Como las protagonistas de ambos, tampoco yo entiendo casi nada de lo que sucede.
ResponderEliminar¡¡Muchas gracias a todos por los comentarios, tan positivos y enriquecedores!! Y gracias a Fernando, por su generosidad. ¡Estoy encantada de haberme embarcado en esta nave, que me resulta de lo más acogedora!.
ResponderEliminarMe quedo con Princesas pero no porque el otro no me guste es por mi tendencia a lo fantástico.
ResponderEliminarEs terrible esa imagen de la joven pinchada como si fuera la mariposa exótica de un entomólogo.
Qué buena manera de empezar a publicar
Un abrazo
Me gusta mucho la asociación de ideas y el sugerente final del primer relato, aunque la concentración del segundo es también fenomenal. Enhorabuena.
ResponderEliminarSusana Camps
Qué sutil la introducción del problema conyugal. Qué inquietante ese final, tan abierto.
ResponderEliminarEn el segundo, me gusta cómo cercena literalmente el concepto infantil de los principes azules. Felicitaciones.
Magníficos relatos.
ResponderEliminarEl segundo me encanta por su brevedad y contundencia.
Un saludo.
Elías
Una excelente primera vez. Queremos más, Nuria.
ResponderEliminarCómo se puede llegar tan hondo con tan pocas palabras... Qué artista. Y qué polifacética. Gracias.
ResponderEliminarcómo me ha gustado tu princesa y yo que juraba que de ellas nunca me iba a enamorar.
ResponderEliminaramor, mo pares de ofrecernos perlas, pero en cualquier caso continuaré presumiendo de tu amistad
Enhorabuena Nuria,
ResponderEliminarMe han gustado mucho ambos, tienes una prosa sencilla y evocadora, la que mejor llega.
Me ha encantado Princesas por el giro y la concentración de tópicos deshechos en un momento. Pero me ha gustado aún más "Giros" porque refleja desde el desconcierto sincero las decisiones que tomamos cada día sin comprender del todo lo que encierran.
Preciosa entrada (aunque otra vez llego tarde ;-)
Saludos,
Rocío
Pues vaya debut, no es por nada. Ha sido un placer muy grande leer estos micros de Nuria, seguro que no serán los últimos.
ResponderEliminarEncantado,Nuria, gracias, Fernando.
¡¡Gracias a todos, de nuevo!! Aprendo de vuestros comentarios, y me admira vuestra generosidad.
ResponderEliminar¡Qué travesía tan placentera en esta nave llena de locos por lo breve!.
Me extraña que con tantos comentarios en esta entrada nadie haya tenido unas líneas para la fotografía, que me parece magnífica. Por lo demás, estoy perfectamente de acuerdo con lo dicho. Un saludo
ResponderEliminarEnhorabuena Nuria. Mi agradecimiento por estos regalos y por todos los que nos esperan...
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