sábado, 22 de marzo de 2008

Las más bellas bibliotecas, 3

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Estas bibliotecas, la mayoría de ellas, sí están pensadas para trabajar; pero fijaos en lo distintas que son, en cómo les entra la luz, la diferente disposición de las mesas o del acceso a los libros, de la relación que se genera con los demás usuarios; por no hablar del entorno en el que se sitúan los edificios que las acogen, algo que aquí no podemos apreciar. Y todo ello, sin duda, las hace distintas.

5 comentarios:

  1. ¿En alguna de tus próximas entradas podrás poner alguna foto de la Österreichische Nationalbibliothek de Viena o de la Biblioteca de El Escorial?...
    Son dos de mis favoritas.

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  2. Sí, daré fotos de ambas bibliotecas, que tengo la fortuna de conocer.
    Gracias por tu curiosidad e interés, y por la música que nos ofreces en tu bitácora.

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  3. En una de mis visitas a Sevilla quedé muy sorprendida de la Biblioteca de nueva construcción (no recuerdo si es la Biblioteca Municipal, o cómo la llamen). Incluso en los dias nublados, y sin necesidad de luz artificial, han conseguido una claridad sobre las mesas sorprendente.
    Muy bonito post el tuyo, porque soy una enamorada del misterio y la esencia que encierra cada Biblioteca.

    Un abrazo

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  4. Estimado Fernando:

    Deberías complacer a mery (y con ello a todos tus demás lectores) e incluir alguna biblioteca ficticia (como la de EL NOMBRE DE LA ROSA, la de LA BIBLIOTECA DE BABEL y, ya en el colmo de la generosidad (ahí no sé cómo se las puede apañar uno), una instantánea de la biblioteca infinita, es decir, de EL LIBRO DE ARENA. Ahí lo dejo, como reto para el domingo ;-)

    Un saludo,
    R. Hurtado.

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  5. Bueno, Rafael, milagros no puedo hacer, por ahora; pero sí espero poder daros, en la última entrega, alguna sorpresa...
    De todas formas, en el libro de Alberto Manguel, sobre los lugares imaginarios, quizás aparezca alguna biblioteca curiosa. Siento no tener ahora el libro a mano.

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